El turismo en Tucumán experimenta un cambio notable en su dinámica tras la pandemia. Esta transformación se caracterizó por el turismo regional y una preferencia de destinos cercanos. Pese a ello, y al gran crecimiento interno en materia de infraestructura, la provincia no termina de explotar la diversidad de posibilidades con las que hoy cuentan los visitantes que arriban a nuestra tierra. 

“A pesar de las mejoras, a veces falta difusión sobre las opciones con las que cuentan los turistas. Personalmente, durante los fines de semana largos, me dedico a hablar con los visitantes para saber sus planes. Muchas personas que visitan Tucumán y se quedan más de dos días no conocen las opciones disponibles. Por ejemplo, pueden considerar visitar Tafí del Valle, pero desconocen la distancia, el tiempo de viaje y las actividades disponibles allí”, expresó Manuel Ramírez, Gerente General del Hilton Garden Inn Tucumán

En diálogo con Norte Económico, Ramírez destacó que la falta de comunicación clara sobre los circuitos turísticos es evidente. “Muchas de las estrategias de comunicación turística se centran en la experiencia, en sentir Tucumán. Sin embargo, a menudo creo que deberíamos ser más directos. Necesitamos informar a la gente sobre lo que pueden hacer en tres días. De esta manera, las personas pueden visualizar fácilmente su itinerario. Creo que este es un problema de comunicación que debemos abordar”, señaló.

Manuel Ramírez, Gerente General del Hilton Garden Inn.

En la misma línea, Marcos Gual, Gerente General del Sheraton Tucumán le aseguró a nuestro medio que la oferta turística provincial es lo suficientemente amplia como para garantizar una estadía de al menos tres días con facilidad. “Sin embargo, el desafío radica en continuar promocionando estos atractivos para que la gente los conozca. A menudo, al mencionar el norte argentino, la gente suele desconocer lugares hermosos en Tucumán, como Tafí del Valle. Creo que el principal desafío hoy en día es seguir trabajando en la promoción de la provincia y en dar a conocer todas las actividades que se ofrecen, lo que permitiría que los turistas disfruten de una estadía de tres o cuatro días y aún así queden con ganas de explorar y disfrutar más”, precisó. 

Gual analizó que, en el ámbito del turismo, uno de los mayores desafíos es competir con destinos que llevan años establecidos y que cuentan con una amplia oferta turística consolidada. “Estos lugares han construido su reputación a lo largo de una década o más. Para Tucumán, este es un desafío continuo que requiere un esfuerzo sostenido y una intensificación de las acciones promocionales. Aunque hemos estado trabajando en ello durante varios años, es importante seguir adelante y redoblar nuestros esfuerzos para que, eventualmente, podamos ver los resultados positivos de nuestro trabajo”, expresó. 

Por su parte, Ramírez destacó otro punto central acerca de por qué hace tanto hincapié en la necesidad de una estrategia comunicativa más directa. “En todas las provincias del norte, el transporte en automóvil es el común denominador. La mayoría de los viajes se realizan en auto. Por lo tanto, la comunicación clara sobre las actividades es crucial, ya que te moverás en auto y siempre temerás perderte algo. La información debe ser simple y secuencial: día uno, día dos, día tres. Hay tantas cosas para hacer en la ciudad, desde visitar la Casa Histórica hasta disfrutar de una amplia variedad de museos y gastronomía”, afirmó.

Conectividad 

Otro aspecto clave que necesita ser abordado para impulsar la actividad turística en la provincia es la conectividad. Ambos directivos están de acuerdo en que este es uno de los principales desafíos que Tucumán debe enfrentar. Es preocupante ver cómo la cantidad de vuelos disminuyó significativamente, operando ahora a solo un 60% de los niveles pre-pandémicos. Esta reducción en la conectividad aérea dificulta la llegada de turistas y afecta negativamente la capacidad de la provincia para atraer visitantes. 

Marcos Gual, Gerente General del Sheraton Tucumán.

“La conectividad es crucial, especialmente cuando necesitás atender a una gran cantidad de visitantes, como puede suceder con la llegada de hasta 3.000 personas en una semana”, indicó Ramírez. El gerente del Hilton Garden Inn adelantó que en abril se espera una mejora en la conectividad semanal. 

“Según lo que nos informaron, se espera que el número de vuelos aumente de 45 a 51, y se está trabajando para incrementar aún más esta cantidad. Actualmente, la ocupación de los vuelos que llegan a Tucumán es cercana al 95%, lo que indica una alta demanda y ocupación. Con la llegada de más vuelos, es probable que esta tendencia continúe”, auguró.

En este sentido, Marcos Gual advirtió que el problema principal radica en la situación económica, ya que los vuelos suelen estar prácticamente llenos. “Personalmente, nunca experimenté un vuelo de ida o vuelta a Tucumán con asientos vacíos. Siempre presto atención a esto antes de abordar y siempre observo que los vuelos están llenos. Las personas con las que hablo también confirman esta tendencia. Entonces, la capacidad no es el problema, ya que la gente sigue viajando. Sin embargo, creo que la situación económica y el posicionamiento son los factores que influyen en esta problemática”, analizó.

Turismo corporativo

Por último, tanto Ramírez como Gual coinciden en que el turismo corporativo también presenta un panorama un tanto indefinido de cara al futuro. “La agenda de eventos está bastante tranquila. Aunque algunas empresas locales en Tucumán están organizando eventos, mirando hacia el futuro, existe cierta incertidumbre. Actualmente, no hay ningún congreso internacional grande programado en el horizonte. Sin embargo, hay algunas posibilidades de obtener eventos en agosto y septiembre, ya que se están realizando licitaciones”, indicó Ramírez. 

Por el lado del Sheraton Tucumán, la realidad es similar y su directivo añadió que la realidad económica mantiene a las empresas expectantes y sin definición en términos de gestión a futuro. “Al conversar con otros empresarios de diferentes sectores, todos parecen estar a la espera, siendo un poco defensivos y renuentes a gastar más. Los eventos se convierten en una apuesta, y algunos comienzan a recortar gastos, reconsiderando la realización de eventos que solían ser habituales en años anteriores”, señaló.

“Antes, un evento que reunía a 500 personas ahora puede ser mixto, con solo 50 personas presentes y las otras 450 conectadas a través de plataformas virtuales. Todo se adaptó a la realidad económica. Este año estamos experimentando una recesión y un reajuste de los factores económicos, lo que nos lleva a adoptar una postura más cautelosa”, concluyó.