En los últimos meses, se ha observado un cambio en la tendencia de la actividad económica en Argentina. A pesar de que los datos aún reflejan un desempeño negativo en comparación con el mismo período del año anterior, diferentes economistas privados indican que la economía podría haber comenzado a recuperarse al cierre del tercer trimestre del año.

Seis consultoras e índices privados han documentado esta reactivación. Un ejemplo significativo es el Índice Compuesto Coincidente de Actividad Económica de Argentina (ICA-ARG), elaborado por la Bolsa de Rosario, que reportó un incremento del 0,5% en septiembre, marcando su sexto mes consecutivo con esta tendencia. Según el informe, estos datos sugieren que la recesión ha sido superada, y se anticipa un período de estabilización provisional en marzo de 2024.

En el marco de estos seis meses de crecimiento, el ICA-ARG ha logrado un avance total del 3,1%. Este incremento permite recuperar casi en su totalidad la caída registrada en los primeros tres meses del año, alcanzando niveles similares a los de diciembre de 2023. Sin embargo, la tasa interanual sigue mostrando una contracción del 3,5% en comparación con el mismo mes del año anterior.

El ICA-ARG se compone de diez indicadores económicos que abarcan diversos sectores, tales como el agro, la industria, la construcción, las importaciones, las ventas minoristas, los patentamientos de automóviles, la recaudación nacional, los salarios privados registrados, la tasa de entrada al mercado laboral y la remuneración total real bruta.

Euforia oficial

El presidente Javier Milei, a través de la red social X, destacó un análisis de Econométrica que sugiere que en agosto la actividad económica habría vuelto a los niveles de diciembre de 2023. 

Ampliar contenido

En su mensaje, Milei señaló que la administración ha logrado reducir la inflación y recuperar la actividad económica inicial, a pesar de haber implementado un ajuste fiscal significativo. Este ajuste, que representa el 15% del PIB, se ha dirigido principalmente a sectores considerados parte de la "casta".

Otro informe relevante proviene del Estudio Orlando Ferreres y Asociados, que señala una caída interanual del 2,7% en septiembre, acumulando una contracción del 5,1% en los primeros nueve meses del año. No obstante, la medición desestacionalizada mostró un aumento del 1,4% respecto a agosto, indicando que el tercer trimestre presenta un crecimiento del 1,4% en comparación con el segundo trimestre.

Los sectores del agro y la minería continúan siendo los principales impulsores de esta actividad económica en recuperación, mientras que las caídas en la industria y el comercio se han moderado. Esto sugiere que la economía podría estar ingresando en una fase de recuperación. 

Sin embargo, los analistas advierten que es probable que se mantengan las dificultades para alcanzar indicadores positivos en la medición interanual.

La consultora Equilibra ha reportado una caída del 3% interanual en septiembre, aunque destaca un aumento desestacionalizado del 0,40% en comparación con agosto. Esto ha llevado a la consultora a ajustar su proyección de contracción del PIB para 2024, revisándola de -3,5% a -3,2% anual.

Indicadores

Por su parte, EcoGo ha afirmado que comienza a observarse una recuperación en la economía real, tras los ajustes realizados en diciembre. El INDEC ha confirmado un incremento del 0,2% en la actividad para agosto, mientras que el indicador adelantado (ESAE) de EcoGo estima un crecimiento del 1,5% en septiembre.

El economista jefe de Adcap Grupo Financiero, Federico Filippini, ha manifestado que hay señales de recuperación en varios sectores, incluida la industria y la construcción. Filippini subraya que la mejora sostenida de los salarios reales será un factor clave para dinamizar el consumo, el cual también muestra signos de recuperación. El incremento en la disponibilidad de créditos y financiamiento en cuotas será fundamental para el cuarto trimestre.

Un informe de la Cámara de Tarjetas de Crédito indica que el uso de tarjetas de crédito en octubre ha superado por primera vez en 2024 los niveles del mismo mes de 2023, ajustado por inflación. Esto se considera una señal positiva de que la recuperación económica está en marcha, permitiendo a los consumidores recuperar parte de su poder adquisitivo.

Filippini anticipa que este año podría dejar un arrastre estadístico positivo del 2% para 2025, lo que podría contribuir a una expansión de la actividad del 5% en ese año.