Las ventas minoristas de las pequeñas y medianas empresas (pymes) argentinas registraron una caída del 14,4% durante el Día del Niño en comparación con el mismo período del año pasado, según un informe reciente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). 

Este descenso, medido a precios constantes, refleja la realidad económica que atraviesan las familias argentinas, quienes se vieron obligadas a priorizar lo esencial y buscar productos más económicos o en oferta. La caída es más profunda en el sector comercial de la provincia. 

De acuerdo a los datos de la Cámara de Comercio de San Miguel de Tucumán, la caída en las ventas fue del 16,3%, es decir que fue mayor a la registrada a nivel nacional. Asimismo, la entidad confirmó que el ticket promedio de gasto fue de $14.000.

En el informe de la CAME se destaca que el comportamiento de los consumidores fue mucho más prudente que en ediciones anteriores del Día del Niño. A diferencia de años pasados, donde las compras incluían productos de mayor valor o aquellos considerados no esenciales, este año las familias se centraron en adquirir bienes más funcionales y necesarios, lo que afectó directamente las ventas en categorías de mayor precio.

Esto se vio totalmente replicado en Tucumán. La Cámara de Comercio analizó que la inflación y pérdida de poder adquisitivo generaron este tipo de comportamiento por parte de los consumidores. El reflejo de esta situación quedó en evidencia con un ticket promedio bajo, menos de la mitad del registrado a nivel nacional (que fue de $31.987), y un 70% de las ventas financiadas con entidades bancarias.

La CAME informó que el resultado general no sorprendió a la mitad de los comerciantes encuestados, quienes consideraban que las ventas estarían dentro de las expectativas. Sin embargo, un 25% de los consultados señaló que las ventas fueron peores o mucho peores de lo esperado, mientras que el 26,9% opinó que los resultados fueron mejores o mucho mejores de lo previsto.

El ticket promedio de ventas en esta fecha fue de $31.987, lo que representa un aumento del 165% en comparación con el año anterior. No obstante, este incremento está muy por debajo de la inflación anual, lo que pone de manifiesto que los consumidores ajustaron sus compras en términos de valor más que en la cantidad de unidades adquiridas. 

Este fenómeno indica que, aunque se gastó más en términos absolutos, se adquirieron menos productos, reflejando una contracción real en el volumen de consumo. El informe también resalta que el 60,4% de los comercios realizó algún tipo de promoción para atraer a los consumidores, una cifra que es 10 puntos porcentuales superior a la del año pasado, cuando solo el 50% de los comercios recurrió a este tipo de estrategias. 

Desplome en todos los rubros

Todos los rubros relevados en el informe de la CAME mostraron una disminución en las ventas en comparación con el Día del Niño del año anterior. Los sectores más afectados fueron "Equipos de audio, video, celulares y accesorios", que sufrieron una caída interanual del 39,6%, seguido por "Calzado y marroquinería", con una disminución del 15,5%.

Estos datos reflejan una clara tendencia: los productos que suelen tener un costo más elevado o que no son de primera necesidad fueron los que más sufrieron la contracción del consumo. Las familias priorizaron sus compras en bienes esenciales, dejando de lado artículos de lujo o no indispensables, una tendencia que se ha acentuado en un contexto económico adverso.