María José Carrizo, Directora Ejecutiva de Junior Achievement NOA, compartió detalles sobre el impacto y las iniciativas de la organización en diálogo con Norte Económico. Junior Achievement, una ONG internacional con más de 100 años de trayectoria, se centra en brindar aprendizaje práctico a jóvenes de 12 a 25 años, combinado con educación financiera, preparación laboral y fomento del espíritu emprendedor.  Se trata de una de las organizaciones más grandes del mundo que está potenciada por más de 500.000 voluntarios y mentores, quienes sirven a 12 millones de jóvenes alrededor del mundo cada año. 

En este sentido, Carrizo enfatizó que el objetivo de Junior Achievement es empoderar a los jóvenes y convertirlos en los protagonistas de sus propias historias, evitando que la vida o el destino les dicten un futuro no deseado. "En el marco de una macroeconomía afectada, la tasa de desempleo juvenil duplica la de los adultos, con el 90% de los jóvenes enfrentando dificultades para encontrar empleo y el 43% ni estudia ni trabaja. Estos jóvenes, en su mayoría vulnerables, a menudo se sienten perdidos al enfrentar decisiones sobre su futuro educativo o laboral al finalizar la secundaria”, recalcó. 

Justamente, esta es una de las mayores problemáticas abordadas desde la ONG con el objetivo de proporcionar una solución al fomentar una actitud emprendedora y brindar habilidades relevantes para el mercado laboral actual.  

“Los programas de Junior Achievement se dividen en tres etapas: inspiración, preparación y éxito, diseñados para desarrollar habilidades socioemocionales necesarias para el siglo XXI. Estos programas, tanto presenciales como virtuales, abordan las necesidades de jóvenes en diferentes etapas de su vida educativa o laboral, desde estudiantes hasta aquellos con experiencia laboral”, recalcó.  

En cuanto al impacto de los programas en las empresas, Carrizo destacó que Junior Achievement desarrolla jóvenes con habilidades que contribuyen a la innovación, el liderazgo y la productividad empresarial. "El 80% de los programas son financiados por empresas privadas, lo que permite que los jóvenes accedan de forma gratuita. La participación de las empresas en estos programas también se presenta como una oportunidad para ejercer su responsabilidad social empresarial y abordar las necesidades de la sociedad”, detalló. 

Inspiración, preparación y éxito: La fórmula que busca impulsar la innovación y el liderazgo joven en las empresas tucumanas

Junior Achievement, que cuenta con una sede física en la provincia de Salta, expandió sus operaciones en la región NOA para incluir a Tucumán y Jujuy, trabajando en colaboración con empresas locales para alcanzar a más jóvenes en la región. “Esta iniciativa ha sido bien recibida por el empresariado local, que ve en estos programas una oportunidad para contribuir al desarrollo de la comunidad y abordar sus necesidades de contratación”, precisó. 

Sin embargo, a pesar de la amplia experiencia nacional de la organización, Carrizo señaló que algunas pymes y empresas locales aún no comprenden completamente el impacto de participar en programas de responsabilidad social.  

“Lo que falta a veces es que las empresas locales abran sus puertas para escuchar y aprender sobre lo que implica participar en programas de responsabilidad social. Muchas veces, hay una percepción errónea de que implica un gran compromiso económico, cuando en realidad es una inversión que puede generar beneficios tanto internos como externos para la empresa. Es importante entender que esta inversión no necesariamente está vinculada con la facturación de la empresa y que puede tener un impacto significativo sin requerir grandes gastos”, afirmó. 

María José remarcó que participar en estos programas es una forma que tienen las empresas de abordar las necesidades de la sociedad. “La educación es una prioridad para la mayoría de las empresas, ya que muchas luchan por encontrar empleados con las habilidades adecuadas para incorporar. Este desajuste entre la oferta y la demanda laboral destaca la importancia de programas como los de Junior Achievement, que preparan a los jóvenes para el mundo laboral y conectan a las empresas con futuros empleados”, aseguró. 

Desafío e innovación 

Ante este contexto, la directiva de la ONG detalló que hay varias metodologías de acompañamiento que tienen un impacto significativo en el número de jóvenes que participan en los programas de Junior. “Este acompañamiento también permite a las empresas diferenciarse, como mencionábamos anteriormente. En cuanto a los programas para las empresas, uno de los programas clave es ‘Aprender Emprender’, que ya comenzó a principios de abril, y el programa ‘Desafío e Innovación’, donde las empresas pueden involucrar su rubro y área en el programa, lo cual es muy interesante”, indicó. 

“Desafío e Innovación” es un programa relevante, que propone a los jóvenes experimentar con la importancia de innovar, crear impacto, asumir riesgos y tomar decisiones. Este programa es presencial y los jóvenes resuelven una problemática presentada por la empresa. A modo de ejemplo, Carrizó contó que, el año pasado, una minera planteó cómo gestionar los efectivos en el campamento y los jóvenes debían proponer soluciones utilizando herramientas de pensamiento estratégico y planificación. Estas soluciones se presentan frente a un jurado compuesto por los dueños y líderes de la empresa. “Este programa sería muy interesante para presentar a los empresarios como una forma de adentrarse en el mundo de las responsabilidades sociales a través de la educación#, expresó.  

María José Carrizo, Directora Ejecutiva de Junior Achievement NOA.
María José Carrizo, Directora Ejecutiva de Junior Achievement NOA.

“En cuanto a la importancia de la preparación, considero a la educación financiera como esencial. El manejo del dinero es un recurso de intercambio fundamental para todos los individuos, sin importar su situación laboral o posición económica. La educación financiera es fundamental para el desarrollo y progreso tanto de personas como de empresas”, concluyó.

En Argentina, Junior Achievement opera desde 1991 y cuenta con oficinas en Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, Salta y Santa Fe; alcanzando con sus programas a más de 1.250.000 estudiantes de todo el país.